Autora:
Becky Albertalli
Editorial:
Puck
Páginas:
315
Cuando se trata de tocar la batería, Leah Burke suele tener buen
ritmo, el tiempo es como su especialidad. Pero en su vida personal las cosas
suelen ir a destiempo.
Leah, una anomalía en su grupo de amigos, es la hija única de una joven madre soltera, y su vida es sin dudas la menos privilegiada. Le encanta dibujar, pero se siente demasiado cohibida para mostrar sus creaciones. Y a pesar de que su madre sabe que es bisexual, ella aún no ha podido reunir el coraje para contárselo a sus amigos, ni siquiera a Simon, su mejor amigo abiertamente gay.
De modo que Leah, en realidad, no sabe qué hacer cuando su sólido grupo de amigos comienza a resquebrajarse de formas inesperadas. Con el baile de graduación y la universidad asomándose por el horizonte, la tensión crece cada vez más. Para ella es difícil dar con la nota correcta cuando la gente a la que quiere está sumida en conflictos, en especial, cuando se da cuenta de que tal vez quiera a una persona más de lo que alguna vez había pensado.
Leah, una anomalía en su grupo de amigos, es la hija única de una joven madre soltera, y su vida es sin dudas la menos privilegiada. Le encanta dibujar, pero se siente demasiado cohibida para mostrar sus creaciones. Y a pesar de que su madre sabe que es bisexual, ella aún no ha podido reunir el coraje para contárselo a sus amigos, ni siquiera a Simon, su mejor amigo abiertamente gay.
De modo que Leah, en realidad, no sabe qué hacer cuando su sólido grupo de amigos comienza a resquebrajarse de formas inesperadas. Con el baile de graduación y la universidad asomándose por el horizonte, la tensión crece cada vez más. Para ella es difícil dar con la nota correcta cuando la gente a la que quiere está sumida en conflictos, en especial, cuando se da cuenta de que tal vez quiera a una persona más de lo que alguna vez había pensado.
Después
del gran éxito de Yo Simón, Homo Sapiens, digamos que tenía las expectativas
muy altas con respecto a la autora y es que ese libro es uno de los que más
disfruté en su año. Ahora, unos cuantos después, llegó Leah a destiempo que, a
pesar de no ser del todo malo, tampoco cumplió las expectativas.
La
historia de Leah ocurre unos meses después de lo ocurrido en el primer libro, y
si bien, se pueden leer por separado, les recomiendo no saltarse la historia de
Simón, total, que un tiempo después, llega la historia de Leah, una de las
mejores amigas de la infancia de Simón.
Creo
que desde el inicio, me di cuenta de que la historia no me iba a gustar del
todo debido a Leah, su personalidad tiene muchas pegas, está plagada de
inseguridades, cambios bruscos de humor y un toque exageradamente infantil, por
no decir berrinchuda.
Es
de esos personajes que todo lo quieren en su momento y de la manera en la que
piensan que debería de ser y a pesar de que ella misma sabe que es de esa
forma, no siento que haga nada por cambiar esto, de hecho, en todo el libro no
creo que haya un personaje con menos crecimiento como Leah. Para mí, acabó
justo como empezó.
Creí,
que la música tendría un mayor papel en este libro, pero, al final resultó algo
más de relleno que de otra cosa.
Aby,
en esta ocasión, la tenemos a ella como co-protagonista y he de admitir que me
hubiese interesado mucho más escuchar su punto de vista que el de la
quejumbrosa Leah, pero al igual que con Leah y su historia en general, no
terminé de creerme su historia. Siento que todo lo que nos cuenta la historia
de esta amistad embona tan demasiado bien que le resta credibilidad. La vuelve
irreal y forzada. Simplemente no le veo ni pies ni cabeza, simple cosa amorfa.
Simón,
bueno, Simón sigue siendo él, y muy a su
manera, sigue teniendo su lugar en mi corazoncito.
Nick,
a pesar de algunas pequeñeces, creo que no me desagrada del todo, es hasta
cierto punto entendible su comportamiento.
Como
ya dije, la secuencia de escenas en este libro causan un halo de falsedad, a
pesar de encajar bien en tiempos y secuencia, se siente como una historia muy
sacada de la manga. Que si bien, entretiene y se lee con mucha facilidad, bien
podría haber no existido y no se sentiría como una perdida.
En
fin, que esa es mi opinión. Y, espero que si discrepamos, podamos discutirlo en
los comentarios. J
¿Conocían el libro? ¿Han leído este libro? ¿Lo piensan leer?
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